jueves, julio 12, 2007

En busca del viaje de nuestra vida

Hay que viajar, porque es cuando sientes que amortizas el tiempo, la vida y también los duros que gastas.

¿Compensa el gasto económico de viajar? Por supuesto!
Sólo piensa que cuando te vas una semana de viaje a cualquier sitio, luego ¿cuánto tiempo estás hablando de ello? Semanas! Meses!
El hecho de ir a un viaje muy lejos y muy costoso, da una riqueza vital, que seguro vas a amortizar. Aunque solamente sea en el tiempo que estás luego dando el rollo a tus amigos.

En el invierno pasado y con la cabeza en el 2007, se nos ocurrió a Lupe y a mi, que había que viajar mucho más. Y no sólo eso, sino que había que fijarse viajes de gran entidad.
¡Que la relación experiencia/gasto fuera máxima!

De ahí salieron unos destinos que pensamos cumplir:

Africa Subsahariana, hay que conocer el continente negro, la raíz de todo.
India, muchos amigos están yendo el país de los mil colores hay que conocerlo.
Nueva York, la ciudad con mil ciudades, el centro del mundo Occidental.
InterRail, el retorno al viaje puro, al viaje autónomo, a las mínimas comodidades y a la integración total y dura con el entorno humano y físico del país que visitemos.
Himalaya, el techo del mundo, y también un poco circo. Pero ser la guinda del pastel que es La Tierra tiene que ser la verdadera sensación se sentirse microscópico. Quiero andar por esos valles infinitos.


Ahora toca hacerlos y sólo es cuestión de ahorrar un poco y reservar las vacaciones necesarias, porque las ganas están ya puestas!

Nueva York, ya ha caído! Y con gran gozo de Lupe y mío. Aquí os lo hemos contado con pelos y todo.

Cual es el siguiente? Pues ya lo tengo en mi mano y es el proyecto InterRail 2007! La semana que viene nos vamos, pero eso es otra historia. :-D

Los caminos paralelos es lo que tienen... que nunca se cruzan

Es por geometría, dos líneas paralelas nunca se cruzan. Y por consecuencia, tampoco los caminos.

Entonces... por qué son tan nombradas las vidas paralelas?
Eso pensé que eran vidas que por tener las mismas o parecidas motivaciones, se enriquecen mutuamente.
Si nos atenemos a la definición, las vidas paralelas nunca se encontrarían y por tanto, no podrían compartir experiencias.

Entonces supongo serán más enriquecedoras dos vidas secantes, o dos vidas curvilíneas, o dos vidas borrachas ...

O realmente lo enriquecedor que tienen las vidas paralelas, es que al saber que piensan lo mismo y buscan cosas parecidas, se están añorando la una a la otra, viéndose desde lejos, deseándose suerte y pensando que algún día,por lo menos una vez al año, se encuentren y se abracen.


Un abrazo!